En Chile se producen 2.650 millones de litros de leche al año, siendo un gran productor a nivel regional. Las exigencias del comercio internacional obligan a ser cada vez más competitivos y cumplir con normas exigentes en materia sanitaria para garantizar la seguridad e inocuidad de los alimentos.

En ese contexto, el uso masivo de antibióticos en la producción ganadera y lechera a nivel mundial genera resistencia a antimicrobianos. Esta resistencia es considerada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como una de las 10 amenazas globales de salud pública. La industria pecuaria y otras utilizan estos medicamentos en el tratamiento de enfermedades (uso terapéutico) y para la prevención de infecciones (profilaxis).

Propuestas  

Es por ello por lo que, académicos de las Facultades de Ingeniería y Tecnología y Medicina Veterinaria realizaron una investigación donde se revisó la normativa existente en el país y a nivel internacional para el control del uso de antibióticos en el sector ganadero-lechero, proponiendo cuatro medidas para avanzar hacia un sistema de trazabilidad de estos medicamentos en la leche y otros productos derivados de la producción pecuaria.

Estas se traducen en normas y procedimientos que contribuyan a implementar programas de trazabilidad y/o vigilancia de antibióticos y de resistencia antimicrobiana, en el marco del Plan Nacional contra la Resistencia a los Antimicrobianos. Algunas de ellas son: Actualizar el Reglamento Sanitario de los Alimentos; modernizar los sistemas de trazabilidad animal e implementar controles y sistemas de registro de presencia de residuos a lo largo de toda la cadena de producción y distribución de leche y alimentos lácteos; impulsar un proyecto de ley para crear un Sistema Nacional de Calidad e Inocuidad alimentaria y organizar un programa nacional de vigilancia de resistencia a antimicrobiano bajo la visión “One Health” que plantea la Organización Mundial de la Salud .

Impacto

“Si bien los productores de leche y carne han mejorado en el uso y control de antimicrobianos, actualmente no existen mecanismos y normativa de trazabilidad que permita certificar que los alimentos de origen animal estén completamente libres de residuos de estos medicamentos”, indicó Patricio Oyarzún, investigador de la FIT.

René Garcés, agregó que “la presencia de residuos antibióticos en alimentos representa un riesgo de Salud Pública, con efectos tóxicos de tipo directos e indirectos. Los primeros son producidos por la utilización de antibióticos en dosis  terapéuticas adecuadas,  pero no respetando los periodos de resguardo en consumir los alimentos de origen animal, por lo que los consumidores finales podrían presentar manifestaciones clínicas diversas, hipersensibilidad y reacciones alérgicas, y lo más grave pueden producirse muertes por bacterias antibiótico resistentes, que pudieron haberse evitado si el antibiótico hubiera controlado el ataque bacteriano. Respecto a los de tipo tóxico indirectos, es importante indicar que en el caso de las  subdosificaciones de antibióticos  en animales enfermos, se contribuye también a la creación de resistencia antibiótica”.

Medidas Propuestas

   Actualizar el Reglamento Sanitario de Los Alimentos.

  Modernizar los sistemas de trazabilidad animal, implementar controles y sistemas de registro de presencia de residuos a lo largo de toda la cadena de producción y distribución.

  Impulsar un proyecto de ley para crear un Sistema Nacional de Calidad e Inocuidad alimentaria.

  Organizar un programa nacional de vigilancia de resistencia a antimicrobiano bajo la visión “One Health”.