Hasta los servicios de urgencia llegan los enfermos con cuadros agudos, politraumatizados, intoxicados, los que debido a la diversidad del tipo de atención que requieren, necesitan de un diagnóstico rápido y efectivo. El médico a cargo de estas unidades deben contar con los conocimientos y competencias necesarias para abordar estas emergencias. Es por ello que en la última década se ha potenciado la especialidad de Medicina de Urgencia. 

La Universidad San Sebastián, imparte esta especialidad desde el 2012 y hoy cuenta con cerca de 100 titulados. Uno de ellos es Cristopher Polma, médico urgenciólogo del Hospital las Higueras en Talcahuano, quien se tituló hace pocos días. "Es una especialidad que implica un gran desafío, ya que uno nunca puede predecir qué tipo de paciente llegará, por lo que la capacidad de tomar decisiones en un ambiente altamente impredecible se vuelve vital".

Opinión compartida por Cristian Williams, médico del Hospital San Juan de Dios, en la Región Metropolitana. "Hay que aprender a manejar la incertidumbre para generar intervenciones oportunas. Es un bonito desafío, donde uno ve que pequeñas decisiones resultan cruciales en los momentos críticos de la enfermedad de un paciente". 

Al respecto, la doctora Ana María Moroni, directora de Postgrado de la Facultad de Medicina y Ciencia USS, sede Santiago, señala que "nuestro aporte es formar especialistas no sólo en la Región Metropolitana, sino que también para otras regiones, médicos que muchas veces se quedan trabajando en las ciudades donde se formaron y otros incluso emigran a otras, más lejanas por vocación profesional. Eso nos llena de orgullo".