Afinando el paro nacional convocado para mañana y el miércoles está el presidente de la Confederación Nacional de la Salud Municipal (Confusam), Esteban Maturana. Asegura que sus demandas son incumplimiento del Ministerio de Salud en materias ya discutidas el año pasado. Asegura, además, que la promesa de campaña de construir 132 nuevos Servicio a Alta Resolución (SAR), "sólo se transformarán en elefantes blancos repartidos en el país", si no se dota de personal suficiente estos recintos, con los requerimientos necesarios y el financiamiento correspondiente.

Usted anuncio para del sector municipalizado de salud el próximo martes y miércoles por demandas incumplidas de parte del Ministerio de Salud ¿a qué se refiere?

Lo principal es el tema del financiamiento, porque como dice el dicho: con plata se compran huevos. Y acá claramente si uno quiere una capacidad de atención a la gente como corresponde, hace falta resolver las brechas que existen en salud pública, y en el caso particular de atención primaria, la brecha entre lo que hace falta y lo que se aporta es de un 40% aproximadamente. Ese es un tema importantísimo.

También tenemos un tema con la salud rural, ya que hay gente nuestra trabajando es una especie de semi esclavitud porque están obligados a trabajar los siete días de la semana, las 24 horas del día porque tienen que atender a cualquier hora, sin importar la hora, si es feriado o no, igual deben atender. También está el tema de las urgencias; nuestro personal se hace cargo de más de la mitad de las atenciones de este tipo, sin embargo no tenemos los beneficios del personal de urgencia del mundo hospitalario. Todas estas materias son parte de los acuerdos que el Ministerio de Salud debe responder para que nosotros podamos reevaluar nuestro llamado a paro.

Usted también hable del per cápita de salud municipal, ¿en cuánto está fijado y cuánto esperan ustedes que aumente?

El per cápita que el ministerio reconoció en 2015 está en $6.050 el basal y en el Presupuesto aprobado para el año 2017 consiga una cifra de $5.274, es decir, estamos bastante lejos en un per cápita que ya debería estar cercano a los $7.000.

¿Y cuáles son los efectos palpables de tener un per cápita menor al que ustedes piden?

Es algo sabido: la gente está muy descontenta con la atención de salud en los consultorios. No hay suficientes médicos, no hay medicamentos que se requieren para la atención de la gente; todas las falencias que ya se conocen y se expresan en que la gente no encuentra la respuesta que necesita.

Respecto a la meta de del Gobierno en la construcción de consultorios, Cesfam, SAR y otros, ¿cómo ven la marcha de esto, considerando que la promesa de hospitales ha sufrido cambios en el tiempo?

Se están construyendo como está planteando, pero de qué sirve tener el país lleno de elefantes blancos, llamase hospitales, Cesfam o SAR, sino está el personal, la capacidad técnica, los medicamentos necesarios o el financiamiento suficiente. No sirve absolutamente para nada, más que para llenar de elefantes blancos el país.

¿Y esto se lo han planteado a la ministra Castillo?

Lo que pasa es que nuestro fundamental tiene que ver con temas de financiamiento en atención de salud primaria, salud rural y urgencias, pero la ministra sabe perfectamente cuál es nuestra opinión y la Presidenta Bachelet también sobre el sistema de salud público en Chile y la molestia por el hecho de que cada año le entreguemos a las clínicas privadas más de US$1.100 millones por año para comprar acciones que nosotros no podemos hacer porque no nos dan los recursos a nosotros.

Considerando que queda menos de un año para que termine la actual administración, ¿ve factible su petitorio?

La verdad es que estamos a la espera de lo que pueda ocurrir en las próximas jornadas. No hay muchas exceptivas con la actual administración, pero bueno, uno siempre tiene que hacer ciertas cosas para avanzar en la solución de los problemas que ha planteado. Se ha avanzado los últimos años, nos ha costado, peor se ha avanzado y eso se ha conseguido a punta de movilizaciones, de paros.